Llevo tiempo sin actualizar mi blog, pero no podía pasar por alto mi enésima visita a Córdoba. Una ciudad que, además de compartir con mi querida Toledo la condición de Patrimonio de la Humanidad, me embelesa y me llama a visitarla cada vez que tengo ocasión.
En esta ocasión, coincidiendo con mi quincuagésimo séptimo cumpleaños (¿a que suena cursi?, pero es que si lo escribo en números resulta la pila… la pila de años ;), me acompañaba mi pareja. Alguien que me sorprende cada día con sus gestos, su amabilidad, su cariño… ¿será que estoy enamorado?
¿Y qué mejor ciudad que Córdoba para continuar consolidando ese amor?
Tras esta parrafada, en la que a buen seguro os habré aburrido, paso a mostrar las fotos… ya sabéis que es un blog fotográfico, ¿verdad?